Vida Minimalista: ¿Cómo ser feliz con poco?

A veces pensamos que cuanto más tenemos, mayor es nuestra calidad de vida. Nos aferramos a la fantasía de que una vida repleta de cosas, es una vida plena y satisfactoria. Es probable que si llegaste hasta aquí, te encuentres con que nada más alejado de la realidad. De hecho, en este artículo, vamos a ver cómo lo contrario si es verdadero. Vivir con menos, puede ayudar a vivir felices, con mucha mayor plenitud y libertad. Este es un estilo de vida minimalista. 

¿Cómo dejar de acumular cosas?

Uno de los problemas principales en nuestra sociedad es el extremo consumismo. Consumir sin poder controlarlo. Ropa, artículos del hogar, apps, videojuegos, comida, cualquier objeto externo que solo sea para calmar un dolor interno. Esto se da por la necesidad de una satisfacción inmediata que genera el comprar o tener algo. En verdad, solamente proviene de una reacción emocional, frente a un vacío o una angustia emocional por algo que nos duele de nuestra vida y aún no hemos podido lidiar.

Para poder frenar este ciclo sin fin, debemos dejar ir a estas emociones, que nos aprisionan y nos retienen, aceptando nuestra sensibilidad.

Poder liberar las emociones nos permitirá ser más libres y empezar a poder optar frente a si quiero comprar algo o no. Reflexionar sobre lo que verdaderamente quiero y necesito. Luego vendrá el plus de darnos cuenta de la cantidad de cosas que hemos acumulado sin sentido. De a poco y si así lo deseamos, podemos tirar, regalar o vender las cosas que creemos que son innecesarias. Empezar a vivir un estilo de vida más minimalista. No es necesario presionarse, porque en cualquier momento uno puede comenzar. Hoy, por ejemplo, puede ser un buen día.

¿Cómo ser feliz con poco?

Ser feliz es cuestión de un profundo sentimiento interno. Nunca dependerá de un objeto o algun logro externo de ningún tipo. El eliminar distracciones o cosas innecesarias, probablemente aumente nuestros sentimientos de:

-Autoestima

-Independencia

-Libertad

-Amor por los demás

-Gratitud

Todo esto propiciará nuestra alegría cotidiana y felicidad, ya que tendremos mejores relaciones, más capacidad de concentrarnos y de alcanzar metas personales. Recuerda que ser feliz con poco no es solamente sacar lo que sobra, sino también, agradecer por lo que ya se tiene. Poder agradecer lo que uno tiene es empezar a vivir desde un lugar mucho más abundante.

¿Qué hacer para vivir una vida minimalista?

Deberás dejar preferentemente todo lo innecesario en tu vida. Esto refiere a cosas materiales. Poder optimizar recursos para cargar con menos objetos y cosas que te pesen en tu día a día. No tiene que ver con el dinero, sino con posesiones materiales de cualquier tipo. Por ejemplo:

  • Ropa
  • Mueblería y decoración
  • Inmuebles
  • Papeles
  • Fotos
  • Libros en papel

En general, muchas de estas cosas requieren mantenimiento, atención y además, puede incluso llenar el ambiente de polvo y ácaros. 

Personalmente, por ejemplo, al deshacerme de los libros físicos, encontré que mis alergias se habían ido por completo, un gran beneficio para mi salud física.

Beneficios del estilo de vida minimalista

Podemos encontrar múltiples beneficios de ser feliz con poco. De vivir con menos cosas. Tu mente y tus emociones se van a ver transformadas y con eso, vendrán múltiples beneficios. Los más comunes son:

-Ahorrar más dinero gracias a tener menos gastos

-Sensación de libertad y liberación emocional y espiritual

-Mayor tiempo libre por consecuencia de menor dedicación a mantenimiento de objetos

-Ayuda a reducir el impacto medioambiental 

-Mayor espacio en tu hogar

Seguramente encuentres muchos más que estos beneficios, de todas maneras, quería compartirte los que al menos a mi, me han resultado evidentes.

Recuerda que puedes leer mucho más sobre el tema de la mano de los expertos: Los minimalistas.

También tienen un documental en Netflix que te podría interesar.

¡Espero que te haya servido este artículo! No dudes en contactarme si tienes alguna duda al respecto.

3 Técnicas para estar más en el Presente

Para muchas personas puede ser muy difícil vivir en el presente. La mente tiene la costumbre de divagar, de irse al futuro o al pasado o simplemente pensar en cómo resolver algún conflicto o problema. Esto nos saca del aquí y el ahora, lugar en donde realmente transcurre la vida. 

Además, el estar encerrados en la mente pensante, obsesionada con el futuro o divagando con lo que ya pasó, puede generar mucha ansiedad y estrés. La verdad es que si no estamos realmente conectados con el presente, seguramente estemos sufriendo algun tipo de síntoma desagradable relacionado con la salud mental. Estar en el presente es siempre sinónimo de salud. 

En base a esto es que te quiero compartir tres técnicas que pueden servirte para poder volver al presente, volver a sentirte más conectada o conectado con la vida misma. Se pueden aplicar en cualquier momento, donde sea que estés.

3 Formas de estar más en el Presente

1. Respirar

Parece muy simple, pero generalmente lo simple tiene más poder que lo complejo. Poder ser conscientes de nuestra respiración que siempre transcurre automáticamente, nos permite reconectarnos con nuestro cuerpo, volver a unir la mente con el cuerpo físico y retomar control del presente.

Puede ser 1, 2, 3 o la cantidad de respiraciones profundas que quieras, pero tienen que ser con intención, con voluntad de reconectarnos. Esta técnica nunca falla, es sencilla y enseguida podrás ver cómo el aire entra y sale de tus pulmones, calmando la mente, alejando cualquier pensamiento intrusivo y conectándonos con nosotros mismos. Aplicalo diariamente y estarás observando el poder de una meditación simple para sentirte mejor. Tiene el plus de aliviar síntomas como el estrés y la ansiedad.

2. Preguntate: ¿Cómo me siento?

Poder preguntarse cómo nos sentimos puede ser el comienzo de entrar en una emoción. Muchas veces nos vamos al futuro o al pasado en pensamientos debido a que queremos evitar una emoción dolorosa, algún tipo de angustia que evadimos para que no nos afecte. Poder darse cuenta de esta negación podrá afrontar la emoción y reconectarnos con el presente de forma sana.

Hay personas que pasan años evadiendo una emoción y por consecuencia, el presente. Recuerda que por más que evadas, la emoción no se irá a ninguna parte. Para poder ser más sensibles y conectar con el presente, puedes leer mi artículo sobre la mejor forma de desarrollar mi sensibilidad.

3. Observación

Puedes utilizar la observación para reconectar con lo que está pasando. Si estás en una reunión, escucha lo que están diciendo. Si estás solo, enfócate en el ambiente, los objetos, el paisaje que te rodea. La observación implica poner atención a eso que está pasando pero nos estamos perdiendo por estar encerrados en nuestra mente racional y pensante. Poder prestar atención y concentrarnos en lo que sucede a nuestro alrededor, puede ser una de las mejores formas de estar en el presente.

Una extra: La naturaleza

Quería dejarte con una forma extra de conectar profundamente con el presente y es salir afuera. Conectar con la naturaleza, un parque, playa, bosque o cualquier lugar que te quede cerca, que esté alejado de la civilización, permitirá que conectemos con nosotros mismos y con el presente tan preciado. Además, si puedes sacarte los zapatos e ir descalzo, bienvenido sea. Es increíble el efecto que puede tener apoyar los pies en el pasto o la arena, el cuerpo enseguida se reconecta con el alma, volviendo a disfrutar del momento presente.

Reflexión

Estar en el presente puede ser un desafío. Además, es dinámico. Puede que tengamos épocas que estamos con mayor ansiedad y el presente se nos escapa aún más. Es cuestión de querer volver, de querer estar mejor con nosotros mismos. Nada es estático y el trabajo de estar en el presente debería ser constante. 

No te juzgues por no estar conectado todo el tiempo. Simplemente fluye y entiende que nadie es perfecto. Estar intentándolo es lo importante. Si te juzgas volverás a caer en la trampa de la mente, de pensar que no eres perfecto, que te falta, que no eres suficiente. Estas creencias limitantes solo generarán más síntomas relacionados al estrés. Por eso acepta siempre tu proceso y cuidate de no caer en este tipo de trampas que tienen más que ver con el ego, que con tu alma.

Espero que te hayan servido estas técnicas para reconectar con el momento presente y sigas adelante en tu camino para conocerte a ti mismo.